Comprando nuevas armas (Ikuto Katsura)

Recuerdo del primer mensaje :

Era sábado por la mañana, ya había terminado de ayudar a la abuela a limpiar y recoger toda la casa. Me dió dinero para que me comprase armas nuevas ya que las mías eran de mala calidad por mi antigua vida. Le di las gracias, me preparé y salí caminando hasta la tienda. Hacía sol, me gustaba la sencasión de calor por todo el cuerpo. Entré en la tienda unos 15min. después de salir de casa. No había mucha gente que digamos. Estaba el dependiente de la tienda conversando con un chico, enseñándole una nueva arma y yo. Comenzé a mirar por el fondo de la tienda mientras me preguntaba cómo debería ir por la calle. Armada hasta los dientes, o con una simple catana. Preferí esperar a que terminasen las vacasiones para hacer caso a los consejos de los profesores.

-Porque me resultas extremadamente divertida, interesante y encantadora-le dije divertido ante su pregunta-¿Y porque tus ojos no paran de cambiar? Parecen un cartel de neones-

-¿Extremadamente?
Dije asombrada
-Juraría que aún no he hecho nada...
Comenté.
-Pues cambian según el estado de ánimo, y bueno...
Me encogí de hombros.
-... Yo soy emotiva

-Pues ya ves que me has cautivado sin esfuerzo alguno-le dije.
-Cualquiera diria que eres inestable psicologicamente por la rapidez en la que cabian tus ojos-le comente.

Reí ante lo primero que dijo
-Quién sabe, alomejor tengo un problema y estoy loca!!
Reí

-Sinceramente, ya tengo mis sospechas al saber la locura que quieres cometer...-le dije con una pequeña sonrisa franca.

Me sorprendí. Yo no tenía nada en mente.
-¿Qué sospechas?
Dije recelosa.
Mis ojos adquirieron manchas grises.

-Que te faltan un par de tuercas en esa cabecita-le dije dandole un par de toques con los nudillos en la cabeza como cuando se toca una puerta y se comprueba que algo no este hueco.

Intenté apartar su mano de mi cabeza, pero no llegué a tiempo así que intenté hacerle una llave, aunque sabía que se libraría.

La pequeñaja intento hacerme una llave a lo que yo respondi rapidamente inmovilizandola sujetando sus brazos por detras de su cuerpo.
-Eh, tranquilita-le susurre al oido y luego le puse una amplia sonrisa al dueño de la tienda mientras comenzaba a empujar a Tobari hacia la salida.
-¡Hasta mañana!-le grite al dueño mientras saliamos de la tienda

Me inmovilizó, como suponía, se despidió del dependiente y me llevo hasta afuera.
-Pues no te metas conmigo
Dije indignada.
-¿Me quieres soltar ya?
Dije en tono amenazador, aunque no del todo en serio. Más bien, jugando.

-No me metia contigo, solo confirmaba lo que tu dijiste-le aclare.
-¿Quieres saber la verdad?-le pregunte alzando una ceja a modo de interrogante

-Sabes que lo dije de broma
Le acusé. Intenté contenerme pero la curiosidad pudo conmigo
-Sí.. quiero saberlo. pero sueltame.

-No lo creo-le respondi a lo primero.
-Precisamente eso es lo que menos quiero hacer en estos momentos...-le dije bajando mi cabeza hasta la altura de su oreja izquierda.

Fruncí el ceño cuando dijo que no me creía. Y luego cuando me dijo aquello a la oreja me puse rígida y mis ojos se volvireon negros en menos de un milisegundo.

Rei por lo bajo divertido al ver como reaccionaba poniendose rigida y le di un pequeño mordisco en la punta de la oreja sin apenas apretar.

Noté como se reía. Mi ojos adquirieron manchas rojas sobre el fondo negro.
De pronto me mordió la oreja, pero si hacer daño, más bien, delicadamente. La miré muy soprendida.
-¿Qué haces?

Esboce una sonrisa en mi rostro.
-Jugar-admiti mientras dejaba de hacer tanta fuerza sobre sus brazos,

Sonreí maliciosa y mis ojos volvieron a ser negros por completo.
-Así que quieres jugar ¿eh?
Reí y aprovechando que había aflojado la presión de mis brazos me solté
-Tendrás que pillarme para eso
Y salí corriendo. puede que no supiese pelear. Pero era muy muy rápida.

Tobari salio corriendo y cuando hubo girado la calle subi sin ningun esfuerzo a los tejados. La encontre ensegui y segui corriendo tras ella sin que se diera cuenta de donte estaba hasta que salte y cai dandole la espalda de cuclillas frente a ella.
-Tendras que hacerlo mejor si quieres huir de mi-le dije mirandola con la cabeza media girada para verla mientras esbozaba una sonrisa peligrosa y me ponia en pie.

Reí. De un salto su bí al tejado d ela casa de al lado y comenzé a correr por encima de las casas. Le di esquinazo durante un momento, pero sabía que pronto me encontraría así que me escondí en un pequeño ricón que había en el tejado de un eidficio y esperé en absoluto silencio.

Me eche a reir cuando la vi saltar. ¿Pero no se entendia que no tenia ni idea de tecnicas ninja? La segui y subi al tejado de nuevo pero no habia ni rastro. La busque alrededor hasta que una rafaga de viento trajo hasta mi su olor, el cual solo tube que seguir, para algo tenia el olfato de un gato. Subi a una especie de caseta dando un par de golpes al suelo al subir mientras buscaba el rastro y me di cuenta de que debia de estar muy cerca aunque no compredia porque no la encontre. Segui de frente y oi un pequeño sonido a mi espada. Me di la vuelta y me agache para comprobar que habia dentro de la casesita. Y alli estaba ella.
-¡Hey ho estrellita!-la salude al encontrarla escondida en aquel lugar.

-Vaya... Si que has tardado. Ya estaba pensando en irme a mi casa
Contesté mientras bostezaba y me estiraba, fingiendo cansancio.

-Claro-le dije con una sonrisa picara-Si ni te ha dado tiempo a controlar tu respiracion, te oia desde dos edificios atras, ¿o seria la excitacion de ser perseguida por un chico tan guapo lo que no te dejaba calmarte?-me meti con ella sin cambiar mi sonrisa.

Alguien habló
-Más bien, la desesperación de no saber como mandarte a la mierda haciendo que te moleste realmente.
Después de unos segundos me di cuenta de que había sido yo. Me encantaba ser tan ingeniosa.

La mire sorprendido.
-¡Hey Ho! Pero si la gatita tiene muy mal genio-le respondi echandome para atras. Parecia que en cualquier momento fuera a atacar. Al final me decido por optar por la posicion mas educada y caballerosa.
Me puse en pie serio.
-Lamento haberla molestado, no era mi intencion hacerla pasar un mal rato señorita Tobari-le deje haciendo una pequeña reverencia a modo de disculpa-Si lo desea me marchare de inmediato y no la volvere a molestar mas