Paseando (Kira Nanami)

Ya me había instalado en mi casa. Me decepcionó no ver a mis padres, pero no debía perder la esperanza. Confiaba en que regresarían. Me había puesto un pantalón corto y una camisa sin mangas con escote. Llevaba el pelo suelto. Estaba dando un paseo por una plaza. Ya averiguaría su nombre más tarde. Tenía todo el verano por delante para conocer Konoha antes de comenzar de nuevo las clases. Me senté en un banco a la sombra y me dediqué a observar el lugar.

Tras haberme escapado por el bosque todavia no me apetecia volver a casa por lo que fui a dar una vuelta por una plaza de arbol en arbol. Hasta que me apoye en una rama y esta se partio callendo conmigo encima.
-¡Cuidado!-le grite a una chica que estaba sentada a la sombra que producia el arbol. Antes de que la rama callera sobre ella gire sobre mi misma y le di una fuerte patada a la rama que salio disparada contra una fuente que se encontraba en el centro de la plaza, aunque ese giro lo unico que hizo fue hacerme caer aun peor al piso y termine callendo de espaldas.

Derepenté escuché como si una rama se rompiese. Alzé la vista y comprobé que tenía razón, pero una chica caía con ella. Me aparté velozmente, pero la chica calló encima mía. Para el caso, hubiese sido lo mismo que me quedara quieta. Alomejor ni me hubiese dolido tanto.-¡Hey! Me estás aplastando-me quejé ante la impotencia del movimiento.

Me levante todo lo veloz que pude.
-Lo siento muchisimo-me disculpe rapidamente y me volvi a colocar la capa de modo que me ocultara el rostro, a fin de cuentas nadie debia saber que estaba alli.

La chica en menos de un segundo se levanto y me pidió disculpas. Lo agradecí. Me levanté y después me sacudí la ropa y me arreglé un poco el pelo. La miré, tenía el rostro oculto tras una capa. Estiré una oreja y la otra la puse de lado. Formando así una especie de "L" con las orejas-¿Porqué llevas una capa?-pregunté confusa-No hace tanto sol-dije mirando por un momento el cielo.

Rei ligeramente ante su comentario.
-No es bueno que me vean por aqui-le explique-Por cierto, ¿estas bien de verdad? Admito que peso lo suficiento como para poderte aver roto un hueso...-le dije un poco avergonzada, pero era la verdad y si esta herida debia hacer algo por remediarlo.

-¿Y porqué no?-pregunté curiosa-No tranquila, no me has roto nada-dije sonriendo-Alomejor me sale algun moretón, pero no creo que nada más-dije mirándome-¿Tu estás bien?-pregunté mientras la miraba.

-Esque me he escapado sin decir nada y como me vea alguien de la casa se va a armar una buena...-le explique-Yo estoy perfectamente, por suerte cai sobre algo blando-dije en tono chistoso.

Le miré mal-Tu ríete, yo almenos puedo salir sin que después me regañen-contraataqué sonriendo. Me encantaba picarme.

-¿Quien ha dicho nada de regañar?-le pregunte curiosa-Yo solo he dicho que se muede armar una buena, pero eso no implica ninguna bronca...-le respondi.

Off: me voy a por mi onicha, luego sigo.

-Es lo mismo. Vas con una capa porque no quieres que te vean porque sino se puede armar una buena-la imité-Yo no tengo que ocultarme

-Bueno es igual-dije terminando la conversación-¿Cómo te llamas?

-Yo soy Kira-le dije extendiendo una mano como saludo-¿Y tu?-le pregunte

Le di la mano-Tobari-dije con una sonrisa dulce y después le solté la mano-¿Eres de por aquí?

Asenti.
-Así es, siempre he vivido aquí-le conté con un tono amistoso-¿Y tu?

-Bueno, he vivido siempre en Tokyo con mi familia adoptiva. Cuando me enteré de que mis padres vivían aquí. Me vine a Konoha, vine con toda la ilusión del mundo a conocer a mi familia, pero mis padres están en una misión y es posible que no regresen nunca. Ahora vivo con mi abuela-le conté. No sé si debería estar triste, no los conocía, no podía sentir afecto por ellos. Supe que los ojos se me volvieron de color gris. No sabía bien qué sentía, si alegría, decepción, enfado... No lo sabía.

-Lo cuentas como si ya estubieran muertos...-comente-Los ninjas de Konoha son los mejores asi que volveran, siempre lo hacen-le dije con una tono alegre y optimista.

-Bueno... si tu lo dices-dije sonriendo-Esque acabo de llegar, no sé cómo son las cosas aquí-me encogí de hombros.

-Pues pronte comprobaras que somos lo mejores-le dije con un tono alegre y esperanzador

Parecía que tenía razón, mis ojos se volvieron azules, como siempre-Me encantaría-dije sonriendo-¿Puedo verte la cara? Esque me incomoda hablar con alguien que no sé cómo es-le pedí.

Lo pense durante un momento. Al tratarse de una forastera no deberia de haber ningun problema con que viera mi cara ya que todavia no deberia de saber sobre los clanes por lo que al final decidi ceder un poco.
-Esta bien-le dije mientras me echaba un poco para atras la capucha de modo que tan solo se me viera el rostro y algunos mechones que me caian a los lados de la cara.

Al final se echó un poco para atrás la capucha y pude verla. Era guapa y su pelo rojizo me fascinó-Me encanta tu pelo-dije sonriendo-Ojalá mi pelo fuese así-murmuré. Sentía envidia por lo que mis ojos se volvieron amarillos

Agradeci el cumplido con una sonrisa.
-El tuyo tambien es bastante bonido y ademas tiene un color muy diferente-le devolvi el cumplido mientras comenzaba a fijarme en sus ojos que hubiera jurado que hacia un momento eran de un color distinto-Los nekos siempre teneis un color de pelo curioso-comente recordando al chico del bosque que lo tenia azul.

-¡Gracias1-dije sonrojándome un poco. esta chica era simpática. Me gustaba los piropos-¿Cuántos años tienes?-pregunté olvidando ya la envidia y sintiéndome más alegre. Mis ojos se tornaron rosas.

-17 ¿y tu?-le pregunte hasta que me di cuenta de que sus ojos volvian a cambiar-Vale... ¿Tus ojos cambian de color muy amenudo o es simplemente que estoy perdiendo la cabeza?-le pregunte rayada.

-14-dije sonriendo. Cuando me dijo que mis ojos cambiaban de color la miré como si estuviera loca-Emm.. son cosas tuyas-en el fondo me estaba divirtiendo por lo que mis ojos se volvieron de color naranja. Sin dejar rastro de mi antiguo color rosa.